Estaban presos, sin embargo al menos cuatro murieron por sobredosis de fentanilo denrto de la cárcel, a otro lo dejaron encerrado con una bolsa de plástico con la que se suicidó, otro llevaba más de un año en espera de juicio cuando también lo dejaron sin observación y se quitó la vida.
Son solo algunas de las numerosas muertes de presos en las cárceles del condado de San Diego por las que este jueves una coalición presentó una demanda colectiva.
Mueren tantos presos en San Diego, que las cifras superan los índices estatales y nacionales.
Tan solo el año pasado, 18 personas murieron en las prisiones del condado, de acuerdo con cifras oficiales.
Los años anteriores, del 2006 al 2020, fueron otras 187 personas las perdieron la vida mientras estaban bajo custodia del sheriff.
De acuerdo con la demanda, se han presentado casos como el de dejar son observación a una persona que los celadores sabían que tenía tendencia al suicidio, o abandonar con una mascarilla puesta a una persona con trastorno mental quien finalmente pereció asfixiado.
Todas las muertes mencionadas hasta ahora en esta nota informativa se registraron tan solo en el 2021.
La demanda colectiva federal contra el condado de San Diego, el Departamento del Sheriff del condado de San Diego, el Departamento de libertad condicional del condado de San Diego y los contratistas médicos y de salud mental de las cárceles del condado de San Diego.
Los demandaron a nombre de seis presos, pero cuyos casos representan a todos los de los actuales reos en San Diego.
La demanda la presentaron dos bufetes de abogados del área de la bahía de San Francisco, junto con la Fundación de la Unión Americana de Libertades Civiles de San Diego.
Fue presentada por falta de atención médica y de salud mental adecuada y por pésimas condiciones de vida para las personas encarceladas en el condado, así como por violaciones de la Ley de Estadounidenses con Discapacidades y desproporcionado encarcelamiento excesivo de personas con discapacidades y personas de color.
Exige que el condado implemente medidas para mejorar la seguridad y proteger los derechos de las personas encarceladas en las cárceles del condado. Estas medidas incluyen garantizar una adecuada atención de la salud física, mental y dental; acomodar a las personas encarceladas con discapacidad.